Elegí visitar la Iglesia de Nuestra Señora del Týn en Praga ya que era un lugar que deseaba mucho conocer. Y, para mi sorpresa, elegí hospedarme en el Kosher Hotel King David únicamente por su ubicación, pero quedé gratamente sorprendido por sus servicios especiales, como platos kosher y un lugar de culto. La comida kosher en mi viaje a Praga fue realmente deliciosa y elegante, con una amplia oferta de platos para todas mis comidas. El desayuno del hotel fue maravilloso, con una selección increíble y de alta calidad. El buffet de cena por las noches también era fantástico, con opciones que iban desde pasta hasta cuscús. Cada día comenzaba con un abundante desayuno kosher lácteo, que incluía platos calientes.

El sábado no había café, y si había "vodka". Frío a las 7 horas por estar celebrando el Sabbat.

Desayuno buenísimo para mi gusto. Habitaciones enormes, con una bañera.- Personal agradable.- Ubicación cerca de la estación central de trenes y de las atracciones principales y del centro de la ciudad.

La comida en el hotel fue deliciosa, con opciones variadas y frescas. Además, me encantó que ofrecieran comida kosher, lo cual fue un gran beneficio para mí. La ubicación del hotel era perfecta, cerca de varios lugares turísticos importantes y con fácil acceso a transporte público. Por último, el personal del hotel fue muy amable y servicial, siempre dispuestos a brindar cualquier ayuda necesaria.

A pesar de los aspectos positivos mencionados anteriormente, hubo algunos aspectos negativos de mi experiencia en este hotel. En primer lugar, el servicio de habitaciones dejaba mucho que desear.

Me hospedé en el Kosher Hotel King David en Praga durante mi viaje y fue muy conveniente. Su ubicación en el distrito histórico de Praga 1 fue ideal, ya que me permitió estar cerca de lugares de interés como la Plaza de la Ciudad Vieja y el barrio judío de Josefov. Además, el hotel está muy bien comunicado por transporte público, con paradas de tranvía y de metro cercanas, lo que facilitó mi exploración de la hermosa ciudad de Praga.

Solo hubo un pequeño inconveniente durante mi estancia en el hotel. La zona designada para el desayuno era un poco limitada en comparación con el tamaño del hotel, lo que hizo que estuviera un poco saturada en ciertos momentos.

El hotel es muy limpio y maravilloso. La habitación es ordenada, super limpia y con una bonita vista. Los desayunos son buenísimos, con vino, verduras y ensaladas. El personal es muy acogedor. La ubicación es buena, al lado de la estación central de trenes, de la vida nocturna y del zoológico. ¡Muchas gracias por todo, seguro que volveré!

un registro simple y un servicio de atención al cliente buenísimo. las habitaciones son insonorizadas y enormes, con una bañera, todo es nuevo. un desayuno buenísimo con ensaladas, frutas y vino, un personal agradable. la ubicación es buena, a 1 km está la plaza de wenceslao.

Nos alojamos por 3 noches y nos ha gustado mucho el lugar. Los espacios públicos estaban muy limpios y el personal era muy bueno. La habitación era de buen gusto, lujosa y la cama super cómoda. El desayuno era excelente, con vino, verduras y postres. Los servicios eran excelentes.

La habitación era espaciosa, con amplios ventanales y una cama comodísima. El desayuno incluía deliciosas comidas típicas judías, lo cual me encantó. Además, la sinagoga del hotel fue una gran experiencia. La relación calidad-precio es inmejorable. El hotel está ubicado muy cerca del centro, por lo que no necesitamos tomar ningún transporte para visitar Praga.

Nada que no me haya gustado 😊

Unos desayunos buenísimos, un personal amable.

La vista a la ciudad y la habitación lujosa y tranquila.

Habitaciones geniales y perfectas con una caja fuerte para tus cosas, una zona cómoda para descansar, y hasta una plancha con tabla para estar siempre presentable. El personal es súper amable y servicial en todo momento. ¡Un lugar de 10! 👌

Hotel céntrico, cómodo y agradable. Personal muy amable.Habitación espaciosa y con ventanales amplios.Desayuno con comida típica judía.Relación calidad precio increíble.Ubicación muy buena, cerca del centro.No necesitas transporte para visitar Praga.Cama deliciosa y habitación amplia.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Teniamos una habitacion cuadruple y las camas principales eran buenisimas, descansabamos de maravilla y no sonaban nada.

El desayuno estaba bien, pero hemos echado en falta variedad de dulce (tipo croissants, etc)(, xq habia mucho salado y poca variedad de fruta, que para nosotros es super importante, pero en lineas generales, no es queja, es simplemente comentar mi experiencia, porque he desayunado bien tambien.

Gracias a todos por estos días fantásticos, recomiendo este lugar insistentemente a otros. Un hotel maravilloso, una ubicación estupenda, una habitación fantástica. Me ha gustado mucho de verdad el restaurante, es maravilloso.

El hotel está muy bien ubicado, cerca de la estación principal de trenes y en el centro de la ciudad. Es conveniente para visitar el centro comercial y disfrutar de las atracciones turísticas. Las habitaciones son grandes y limpias, con baños amplios y cómodos. El personal es amable y servicial. El desayuno ofrece una amplia variedad de opciones y la comida es kosher para quienes lo requieren.

El hotel puede resultar confuso para aquellos que no están familiarizados con las costumbres kosher, y puede haber cierta discriminación hacia personas de otras creencias durante ciertos momentos del día.

Es un edificio antiguo rehabilitado, y el único que encontramos con ascensor de toda Chequia, y estuvimos en 6 diferentes. El personal correcto y el desayuno variado. La habitación espaciosa y la cama enorme, se coge el canal de TVE para los que echan de menos el castellano. El baño grande y limpio.

La ubicación del hotel está bastante céntrica, a unos 10 minutos andando de la torre de la pólvora, pero la zona es un poco sórdida y sucia, como casi todas las que están cerca de una estación de autobuses, y está al lado de un nudo de carreteras con lo cual hay bastaste ruido y contaminación, pero si te dan una habitación interior ni te enteras.